Contenido del artículo
Los chicles son, por definición, una concentración de productos químicos, colorantes y conservantes. Pero entre ellos, hay que evitar uno en particular: el dióxido de titanio.
Actualización del artículo el 17 de marzo de 2019
Es oficial, el 17 de marzo de 2019 se anunció la prohibición del aditivo E171 en los alimentos, aplicable el 1 de enero de 2020, en Francia. Este aditivo, que no es otro que el dióxido de titanio, es motivo de preocupación porque es probable que esté presente en forma de nanopartícula, un tamaño diminuto que le confiere propiedades especiales y plantea dudas sobre su toxicidad. Un estudio realizado por el INRA (Institut national de recherche agronomique) en 2016 hizo temer la carcinogenicidad del dióxido de titanio “nano” por ingestión, temores que los fabricantes no han conseguido disipar, ya que aún no han aportado pruebas de la inocuidad de este aditivo. El dióxido de titanio también se utiliza en productos cosméticos, como filtro anti-UV en cremas solares, como agente colorante en maquillaje, pasta de dientes o incluso en bálsamos y barras de labios. En estos últimos casos, se puede ingerir una pequeña cantidad. Por tanto, la exposición de los consumidores es similar a la de los productos alimentarios, aunque en menor medida. Es en aquellos productos que pueden ser ingeridos donde pedimos al consumidor que sea precavido.
Dióxido de titanio E171
Presencia de dióxido de titanio (E171)
El dióxido de titanio es un agente colorante que se utiliza en la pasta de dientes, los filtros UV de los protectores solares, la pintura y las superficies de las carreteras. En los alimentos, este colorante es muy utilizado, aunque no hace otra cosa que hacer que los alimentos sean más blancos o brillantes.
Toxicidad del dióxido de titanio (E171)
El dióxido de titanio (E171) ha sido clasificado como posible carcinógeno humano cuando se inhala. Se ha clasificado como sustancia peligrosa cuando se absorbe. Y la exposición de los niños sería especialmente preocupante.
La presencia de estas nanopartículas “no está prohibida por la normativa francesa y europea”. Pero estudios recientes muestran efectos preocupantes sobre nuestra salud (como el estudio realizado por el instituto de salud holandés RIVM, que advierte de riesgos para el hígado, los ovarios y los testículos).
La EFSA ha cedido al lobby alimentario y acaba de volver a autorizar el aditivo E171 en septiembre de 2016 con el pretexto de que no hay suficientes pruebas de los efectos sobre la salud de los consumidores…
Algunos investigadores creen que estamos en la misma situación que con el amianto hace 40 años. Advierten de los riesgos inflamatorios (interacción con el oxígeno de las células, alteración del ADN, muerte celular, actividad proinflamatoria sobre los pulmones y el peritoneo, etc.), de la forma en que puede atravesar diversas barreras fisiológicas (lo han encontrado en la sangre, el hígado, el bazo, los riñones, los pulmones, el corazón y el cerebro de los animales) y de acumularse en el organismo sin poder ser eliminado por el tamaño tan pequeño de las nanopartículas.
Goma de mascar que contiene dióxido de titanio (E171) – antes de 2020
Todas las marcas que se venden en los supermercados contienen dióxido de titanio:
- Hollywood,
- Wrigley’s Freedent,
- Mentos,
- Las ondas,
- Stimorol,
- Malabar…
Compruebe la lista de ingredientes del E171. También lo encontrará en muchos dulces (especialmente en los M&M).
Chicle sin dióxido de titanio (E171)
Hay pocos y no están disponibles en todas partes, pero puedes encontrarlos en Amazon (envío gratuito para compras de 25 euros).
Ranking de los mejores chicles sin azúcar, y sobre todo sin colorantes/conservantes:
- Goma de mascar Propóleo y menta Apimab Propolia 2×27 comprimidos por 2,90€.
- Chicza Lima Bio Gum 12 comprimidos por 2,30€.
- Bioformule – Plantas – Aliento Fresco 12 comprimidos por 6,99€.